El Port de Tarragona ha recibido con satisfacción la noticia que el otorgamiento por parte de la Agencia Catalana de Turismo (ACT) de la distinción de Barrios y Villas Marineras al barrio del Serrallo de Tarragona. El Presidente del Port de Tarragona , Josep Maria Cruset, ha calificado de excelente la noticia y celebra que las equipaciones culturales promovidas por la Autoridad Portuària de Tarragona hayan ayudado a lograr esta certificación de la ACT y del Departamento de Empresa y Conocimiento de la Generalitat de Cataluña.
Barrios y Villas Marineras es una de las marcas de promoción turística impulsada Turismo de Cataluña para promover el turismo como herramienta de desarrollo, diversificación económica y garantía de futuro para las ciudades, pueblos y villas,para trabajar para la desestacionalización de la actividad turística y para proteger la conciliación y el equilibrio entre los residentes y los visitantes/turistas.
El comité de expertos responsable de avaluar y validar las solicitudes de acceso a la marca visitó el barrio del Serrallo el pasado día 19 de junio de la mano de la directora de Puerto Ciudad, Montse Adan, y de la directora del Museo del Port, Mercè Toldrà. Durante la visita los técnicos de Turismo de Cataluña pudieron visitar el espacio didáctico del Observatorio Azul y conocer *elprojecte de rehabilitación del Museo del Puerto y el nuevo proyecto museográfico que lo convertirá en todo un referente dentro del sector. El comités de expertos conocieron así la apuesta cultural, de proyección y recuperación del patrimonio que se está haciendo desde el Museo y desde el Puerto de Tarragona.
En este sentido, el presidente del Port celebra que en la decisión de los expertos haya influido positivamente la existencia, la tarea y las actividades de equipaciones como el Observatorio Azul, el Museo del Port, el Teatret del Serralloi lo tinglados y refugios del Moll de Costa”. Cruset afirma que este conjunto de equipaciones“es una contribución del Port cabe el barrio, la ciudad y el territorio que, juntamente con los vecinos, los pescadores,las entidades sociales y culturales del barrio, y los restauradores han convertido esta zona en un atractivo turístico con carácter propio”.
Precisamente, en la nota de prensa hecha pública hoy, la ACT destaca que “el Serrallo, el actual barrio de los pescadores tarraconenses, es un ejemplo vive, pleno de actividades que muestran como es de vivo el vínculo entre el hombre y el mar”. Y explica que “su oferta cultural es tan extensa como su tradición pesquera, muy representada, entre otros, por el Museo del Port, donde se propone un recorrido por la historia del puerto y sus embarcaciones, desde que los romanos desembarcaron hasta la actualidad, a partir de visitas guiadas y propuestas educativas de ocio familiar”.
El ACT también destaca como “el 'Observatorio Blau', la Cofradía de Pescadores, el Port y los mismos vecinos, entre otros, también se encargan de mantener vivos la historia, las costumbres, las festividades y las tradiciones de uno de los barrios marineros por excelencia”.
Finalmente, el presidente del Puerto considera que “para el Port de Tarragona es una excelente noticia que el Serrallo reciba esta distinción puesto que para nosotros es un espacio muy estimado al cual hemos destinado muchos recursos para mejorar la calidad de vida de los vecinos y vecinas, para mejorar el espacio urbano y para dotarlo de equipaciones y actividades lúdicos y culturales que ayuden a difundir su historia y tradiciones, entre otros”.
El Serrallo, el barrio marinero de Tarragona, es un espacio de referencia gracias a su variada oferta gastronómica y su ubicación privilegiada cerca del mar. El comercio del Serrallo ha ocasionado una gran tradición gastronómica. Sus restaurantes y comercios, muchos de ellos con una trayectoria casi centenaria, ahora están en manos de hijos y nietos de pescadores, y conservan la esencia marinera de un espacio con una historia eternamente ligada al mar.
Hace cientos de años que los pescadores de Serrallo miran al mar, a la sombra protectora de la milenaria ciudad romana, siempre preocupados por el tiempo, el estado del mar o sus embarcaciones, antiguamente varadas en la arena de la playa , y más tarde protegidas por la seguridad que les da el abrigo del muelle.
A finales del siglo XVIII, cuando la Junta de Obras del Puerto proyectó la construcción del barrio de la Marina en la parte baja de la ciudad, los pescadores vivían en las barracas de madera, o "tiendas de mar", cerca de la playa donde tenían sus barcas de pesca. Fue entonces cuando se trasladaron junto al lazareto y los antiguos restos del fortín del Francolí. Fue durante el siglo XIX, que esta zona comenzó a recibir el popular nombre de 'Serrallo'; topónimo del que se cree que surge debido a los collados, las rocas cercanas a la costa llamadas así por los pescadores de aquella época. Hoy en día, la palabra Serrallo es una marca que hace referencia a uno de los barrios con más sabor mediterráneo de Catalunya. El Serrallo es un espacio emblemático de la ciudad de Tarragona, una pequeña joya del litoral mediterráneo.
A lo largo de su historia, el Port de Tarragona ha estado muy vinculado al Serrallo, con el que mantiene unos lazos muy estrechos. La zona serrallenca ha sufrido una evolución lógica con el paso de los años, a salvo de las instalaciones portuarias con las que ha convivido en armonía. Las entidades encargadas de gestionar el puerto, primero la Junta de Obras del Port de Tarragona, y ahora la Autoridad Portuaria de Tarragona, la han tenido siempre presente. Las últimas actuaciones han contribuido a conformar la espléndida realidad que es hoy el Barrio del Serrallo, donde atraca y opera la flota pesquera más importante de Catalunya, y donde habita un importante núcleo de ciudadanos de Tarragona con carácter y esencia marinera.
El entorno más cercano del Port de Tarragona, goza de un tejido asociativo y vecinal muy involucrado en la dinamización de nuestra ciudad. Se pueden consultar las diversas fuentes de información que a continuación os exponemos, para informarse y participar del grueso de actividades organizadas a lo largo de todo el año y especialmente en las fiestas mayores de cada barrio.