Salto cualitativo en la mejora de la eficacia en la gestión energética

El Port de Tarragona también está llevando a cabo un esfuerzo en la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones portuarias, en la línea con lo que denominamos smart ports; es decir, puertos tecnológicamente avanzados y eficientes desde el punto de vista del consumo energético. Las actuaciones principales y con inversiones importantes en esta materia se basan en la reducción de los consumos energéticos como combustibles, electricidad y agua.

En el marco de esta línea de trabajo, el Port de Tarragona ha puesto en marcha una instalación fotovoltaica para consumo en la cubierta del edificio del Punto de Inspección Fronterizo (PIF), que permite la generación de electricidad utilizando una fuente de origen renovable cómo es la radiación solar.

Con esta acción se consigue la reducción de emisiones de gases del efecto invernadero, la producción de energía cercana al consumo y también la reducción de las pérdidas originadas por su transporte, así como la no dependencia de fuentes energéticas exteriores.

Esta instalación, con una potencia nominal de 20kW, genera energía eléctrica que es consumida en el propio edificio y que representa más de un 20% de las necesidades totales. Los prácticamente 26MWh/año producidos representan un ahorro anual de emisiones de 17 toneladas de CO2.

Utilizando equipos y tecnologías eficientes y de calidad garantizada, la instalación dispone de la nueva tecnología de Control de Inyección Cero, con lo que se garantiza que la propia instalación regula la producción para que no sea superior al consumo y, por lo tanto, no se inyecte energía en la red eléctrica exterior al edificio.